Que vengas por detrás, me cojas por la espalda y no me sueltes, que no me sueltes nunca.Y que me comas a besos, a cualquier hora del día y en cualquier lugar. Que me llames 'amor', 'cariño mío', 'mi niña' y de todas las formas que se te ocurran, y que así no tengas ni que pronunciar mi nombre; y que me pidas perdón, perdón por eso, por llamarme amor. Que me repitas cuánto me quieres, que nunca viene mal escucharlo una vez más si sale de tu boca, que no me canso de oírlo, de oírte, de besarte, de abrazarte, de mirarte, de pegarte y que me pegues, de que me llames guapa mientras me sonríes, de pasar las tardes y las mañanas junto a ti, no me canso de ser tu niña, y no, no me canso de quererte, ni siquiera un poquito.